sábado, 4 de octubre de 2008

EL PATER FAMILIAS



El héroe de John Ford suele ser un Pater Familias. Cualquiera sea la condición y los lazos sanguíneos del héroe, su funcionamiento arquetípico será el de un Padre. En My Darling Clementine(1946) está presente esa operatividad mítica que hace del protagonista alguien consciente de su posición en el mundo: El personaje de Wyatt (Henry Fonda) es uno de los hermanos de la familia Earp, pero siendo hermano no deja de accionar como un padre. El relato comienza cuando los Earp deciden hacer un descanso en el largo trayecto hacia la casa paterna; una vez que acampan Wyatt y los otros dos hermanos deciden ir a la convulsionada Tombstone dejando al hermano menor a cargo de la hacienda, "Para tomar unas cervezas y afeitarnos" dirá Wyatt. Por la noche, cuando retornan de su incursión se conmocionan al ver que su hermano joven esta muerto y que la hacienda fue robada. Ese desgarro trágico es un disparador de las misiones familiares del héroe fordiano.(1)

El proceder de Ford frente a lo trágico es una característica de su estilo; el pathos de lo trágico se experimenta a través de la sobriedad de su Puesta escena, sin recurrir a ningún tipo de énfasis: Ford nos anuncia algo premonitorio a partir de una lluvia torrencial; ante el hallazgo doloroso, la cámara en la noche permite ver solo los sombreros mojados ; los tres Earp miran el cuerpo inmóvil de su hermano en el barro, quien todavía mantiene un pie sujeto al estribo, como si no hubiera podido escapar a su destino. La escena no necesita nada mas que lo que vemos. Las palabras no servirían para expresar lo que sienten los Earp. El sombrero que nos impide ver el rostro de cada hermano nos transmite luto y reserva masculina. Solo se escucha el repiqueteo de la lluvia en la oscuridad. El lodo que ensucia el cuerpo del joven nos hace pensar en las motivaciones de los atacantes. Los hermanos tapan el cuerpo con un impermeable. La quietud de la cámara por encima de los sombreros es la mirada de alguien que comprende el dolor.

En otras ocasiones Ford ha procedido así; sin enfatizar y sin anunciarnos que esta pasando algo fuera de lo común. En The Searchers(1956) hay una escena en la que, otro padre, el reverendo unionista Clayton (Ward Bond) espera que los integrantes de la familia hayan salido de la casa , cierra la puerta y se queda, ex profeso, con Ethan (John Wayne) y con la madre de las chicas; si el espectador no sabe mirar como Ford propone, corre el riesgo de perderse el sentido de la escena; el reverendo está tomando café, dándole la espalda a Ethan y a la mujer; los dos son cuñados y necesitan ese momento de despedida único; frente a ellos el reverendo actúa como un veedor que sabe y no sabe de ese afecto entre cuñados; mira con simulada desaprensión hacia un lugar indefinido; la mujer abre un arcón y acaricia una capa militar de Ethan que permaneció guardada durante mucho tiempo; Ethan se pone la prenda como si fuera un ritual aprendido y esperado; antes de irse se despide de su cuñada besándola en la frente. El reverendo es cómplice ante ellos, ante nosotros y ante Dios. Nadie mas parece saberlo; lo sorprendente de Ford es que nos muestra la situación con cierto pudor, como si le pidiera al espectador que sea reservado. (2)

En la She Wore a Yellow Ribbon (1949) ford plantea un recurso similar que es propio de su Estilo. En lugar de utilizar palabras para explicar algo recurre a un hecho, que deja pensando al espectador: El comandante y dos de sus soldados jóvenes están guarecidos a cierta distancia de los indios, para no ser vistos. El cacique y sus seguidores han descubierto que el hombre blanco que vende los rifles los ha traicionado vendiendo armas al enemigo. La tribu enfurecida rodea al mercader .Por la expresión de sus rostros los observadores ocultos adivinan lo que se avecina. La tortura es inexorable, la furia y el descontrol que desata la crueldad sobre el mercader de armas esta plagada de gritos salvajes. El hombre blanco no tiene escapatoria. Lo que el comandante y sus soldados ven es doloroso para ellos, mas aún porque no pueden reaccionar. Uno de los soldados se tapa la cara para no ver; ante ese sentimiento de impotencia el comandante, que no puede dar ningún tipo de respuesta, les ofrece un puñado de tabaco para mascar, mientras miran lo que no quieren mirar. Los tres mascan el tabaco amargo sin emitir una palabra. Esto es una actitud propia del pater familias ante el joven que todavía no sabe como reaccionar frente a los alcances profundos del dolor. En su lugar otro director hubiera procedido con algo esperable; alguna frase memorable quizás; pero Ford que nos desconcierta por la forma de responder simple, a la vez nos humaniza.


Si volvemos a la noche trágica de los sombreros mojados en My Darling Clementine, veremos que la elipsis nos conduce al día posterior y nos hace pensar en la elaboración del dolor por la pérdida. Es la instancia de la Juramentación familiar de Wyatt frente a la lápida del hermano joven: El día claro nos entrega limpidez, y ya hay sequedad en el suelo. Antes de empezar a hablar, Wyatt termina de acomodar unas lajas alrededor de la lápida. No hay nada grandilocuente en la escena que construye Ford. La disposición escénica tiende a la aparente sencillez, pero aún así el espectador percibe que, aunque no este explicito, hay algo trascendente que acompaña a esa sencillez. La manera de componer invisible, oculta la complejidad. Estamos frente al sesgo Fordiano, que hace que lo simple se eleve por encima de lo cotidiano. No hay sentimientos subrayados ni exceso de palabras. La ubicación de la cámara nos permite estar cerca del suelo, por eso el espectador siente que la tierra forma parte de este ritual .El hermano Wyatt habla sentado sobre el terreno casi de espaldas a nosotros y mira hacia la lápida inclinada como si hablara con su hermano. De fondo, a lo lejos, está uno de los picos elevados del monumental Valley. Esa distancia, esa profundidad y ese elevarse hacia el cielo es propio de la naturaleza Fordiana que hace que el momento que experimentamos sea único.

Las palabras simples de Wyatt recuerdan el fraseo cotidiano de cualquier conversación familiar. En un plano mas cercano de Wyatt, el toque de eternidad lo aportan las nubes que siempre acompañan los cielos fordianos. Es el tono de un hermano mayor que elige las palabras, pero también es el de un padre que le habla a un hijo que ahora esta lejos. Lo simple y lo elevado juntos, indiferenciados; el espectador siente mucho mas que lo que se ve. En la juramentación de Wyatt escuchamos hablar del Padre y de Cori Sue, la novia del muchacho. En las obras de Ford lo familiar suele ser un disparador para la misión. En su monólogo Wyatt nos hace saber su grado de conciencia como responsable del grupo familiar frente a su padre. Los personajes de Ford suelen juramentarse. Antes de partir Wyatt le confía a su hermano que " algún día el mundo tendrá que ser para que los jóvenes como el puedan habitarlo." (3)

El viaje del Pater familias fordiano es para restablecer el orden perdido. Aquellos que han perdido su referencia y su origen son buscados y encontrados por el Pater familias para que este les recuerde quienes son y de donde vienen. En The Searchers Ethan Edwars emprende la travesía con ese fin. Otras veces el viaje sirve para descubrir la casa del héroe fordiano. Yendo hacia la casa Paterna , Wyatt descubre su casa en Tombstone(4).

Para fundar la casa, Wyatt debe narrar los rituales de esa fundación. Por eso Ford recurre a la profundidad y a la amplitud visual. El ritual debe ser mostrado como si fuera un acontecimiento natural, sin excesos, con elegancia y sobriedad. Los personajes de Ford viven el ritual, como algo cotidiano, cuando se sientan a la mesa, es porque saben cual es el sentido de la situación. Por eso Ford recurre al plano integro. No estamos, en la época de los detalles o de las fragmentaciones. Ford entiende que el ritual , para que sea instaurado como tal debe mostrarse desde una mirada abarcatoria. Que nos permita ver la plena identificación de todos los que están integrados al plano. Basta pensar y recordar algunas escenas que dan cuenta de esta ritualizacion fordiana de la Puesta en escena. Las películas de Ford podrían verse como un encadenamiento de rituales necesarios para que el Pater familias pueda cumplimentar la misión.

La escena del Saloon en la que el hermano de Wyatt (otra vez Ward Bond) hace deslizar la pistola sobre la barra para que le llegue a Wyatt es una muestra de ello. La escena está cargada de tensión, porque Doc Hollyday está midiendo fuerzas con Wyatt en el extremo de la barra. Hay un momento de provocación de parte de Doc y un brusco irrumpir del silencio se adueña del lugar. Ese tempo silencioso es violencia contenida, a punto de explotar. La excusa es el champagne o el whisky; esto es un reflejo de los caracteres de Doc y Wyatt. El resentido Doc es un hombre culto pero malogrado, que insiste con el champagne; a Wyatt parece no gustarle ese vinagre fermentado que le esta ofreciendo Doc; porque Wyatt es ajeno a lo sofisticado, por eso prefiere algo que le queme la boca. Las lámparas bajas del Saloon iluminan el momento. El esplendor del ritual nos hace pensar que Ford quiso mostrarnos la disputa como si fuera la única forma posible. Son varios los sombreros que asoman en la línea de profundidad de esa barra. Ford nos hace sentir que el Saloon es una casa y que todo el pueblo esta pendiente de esa medición de fuerzas. El Sheriff Wyatt es un Padre que ha perdido a su hermano y ahora mide fuerzas con Doc para ordenar la casa que quiere refundar. A mas tardar y sin darse cuenta, Doc será para Wyatt otro hermano mas.

Al ejercer esa función paterna el héroe Fordiano se convierte en un arquetipo de héroe con características propias. La clave esta en reconocer aquellos signos que el azar o el destino le ofrece para resolver la encrucijada de su búsqueda. Esos signos solo pueden ser reconocidos por alguien que carga con el imaginario familiar; alguien que tenga sentido del legado. A veces, el encargado de transmitir el legado es el pater familias; por eso los hijos adoptivos, como Marty(Jeffrey Hunter) en The Searchers, aprenden a leer lo que el camino les depara, porque el pater familias les va interpretando; en otras ocasiones esas señales a interpretar son aportadas por los locos o por los borrachos que siempre pululan en los relatos fordianos. El pater familias sabe que esos marginales dan indicios de la verdad.

En Tombstone aparece Shakespeare y no es casual que Ford recurra a otro marginal como el actor que representa a Hamlet. En sus obras los marginales encarnan la gracia y la verdad del humilde .Los versos de Hamlet recitados por el actor primero y continuados por Doc Hollyday (Victor Mature) después, se resignifican y funcionan como un reflejo de la mirada que el frustrado Doctor tiene del mundo. Ante la perplejidad de todos, Wyatt escucha muy atento el recitado de Doc, y parece entender que, con sus palabras, Doc anuncia algo oscuro para si mismo.En Ford la tragedia y la comedia van por el mismo andarivel. El camino es uno solo, y la búsqueda dolorosa no descarta la ayuda de los comediantes, locos y borrachos. Por eso el Pater Familias deberá interpretar los entrelineas de estos marginales para llegar hasta el final.

Pensemos en Ethan Edwards, que en su camino se va topando con cada uno de los restos que Debbie (Natalie Wood) fue dejando ;el vestido celeste de la muñeca es similar al vestido celeste de la cuñada asesinada; el cine de ford, sutilmente nos hace sentir que en la búsqueda de Ethan están las dos cosas; el encuentro final con Debbie elevará al extremo la tensión trágica: el peligro que corre Ethan ante esta instancia es perder de vista lo que se debe reconocer y dejarse llevar por su odio.La escena nos conduce al ritual que Ethan compartía con Debbie cuando ella era chica: levantarla por encima de el y sostenerla con los brazos en alto, como si estuviera consagrándola. La escena tiene una carga trágica, porque para ejercer este reconocimiento es necesario que Ethan se despoje de su odio y de lugar a su corazón; para ello está Marty, para recordarle que alguna vez hizo lo mismo por el. Ethan rechaza su ayuda, sin embargo la rememoración se hará presente. El reconocimiento del Pater familias suele involucrar al corazón.

Con Wyatt va a ocurrir algo similar cuando se encuentre con la Cruz de Latón de su hermano asesinado; recordemos que Chihuahua(Linda Darnell) la prostituta enamorada, actuará por despecho hacia Doc y tendrá amoríos con uno de los asesinos del joven Earp; la cruz que lleva Chihuahua, terminará convirtiéndose en la señal de reconocimiento que el destino le ofrece a Wyatt para saber quien mató a su hermano. Por otro lado esa cruz representa el equívoco y la inocencia, tanto del joven Earp, que confundía la plata con el latón, como la de la pobre Chihuahua, que creía en el amor de Doc. A su vez en The Searchers, la cruz que le cuelga al comanche Scar, es la que Ethan le regaló a Debbie cuando era niña. Esa cruz es una condecoración sureña que nos permite identificar a Debbie, pero, además le recuerda a Ethan que el es un guerrero del ejército que perdió. No olvidemos que Ethan es un resentido, que vive su búsqueda como si nunca se hubiera rendido. La sangre india de Marty, su hijo adoptivo, lo ayudará a que su odio se disipe. El joven Marty será un futuro pater familias, que irá mas allá del resentimiento de Ethan.

Las mujeres Fordianas son las que esperan y son los jóvenes los que salen en busca del padre. Los jóvenes adoptan a sus padres y les exigen que sean padres. Asi como Marty adopta a Ethan, el soldado yanqui joven de The Searchers va a adoptar al reverendo Clayton(5) Por su lado las mujeres fordianas esperan el regreso del Pater Familias, para que al retornar de su búsqueda encuentre o construya de la casa familiar. La casa fordiana no tiene sentido sin una mujer.

En el mundo fordiano la mujer es la casa y la tierra; y es ella la que ayuda al pater familias a completarse; recordemos sino a Clementine y a Wyatt en sus acercamientos iniciales; Wyatt se afeita y se peina en la peluquería de un hombre que también saca muelas. Cuando los hermanos ven a Wyatt transfigurado no terminan de sorprenderse; los dos huelen extrañados hacia Wyatt:"Huele a azaleas" dice uno de ellos sin precisar de donde viene el perfume; a esto responde Wyatt:"Es el peluquero", justificando ante sus hermanos la perdida momentánea de su rudeza; en una escena posterior, la timidez de Wyatt le impide invitar a Clementine a la pista de baile, hasta que al final decide hacerlo. La escena del baile entre Clementine y Wyatt es una de las mas bellas del film. Nadie como Ford para mostrar en amplitud los acontecimientos de la vida festiva. El sheriff Wyatt muestra elegancia y conocimiento para ejecutar los pasos de baile junto a Clementine. Es un momento de alegría compartido para varias personas del pueblo.El sentido de la escena apunta en esa dirección, pero, también es una manera de anticipar algo que nunca vamos a ver, pero que intuimos que puede llegar a ocurrir: Clementine y Wyatt bailan como si festejaran una boda; su propia boda; y no es casual que sea sobre las tablas de una iglesia en construcción. Al ver esta faceta de Wyatt sus hermanos, que pasaban por allí, detienen bruscamente su carreta porque Wyatt no deja de sorprenderlos.


Pero en Ford el amor no se expresa solo con cortesía. Muchas veces las mujeres y los hombres fordianos expresan su amor a través de lo físico. En la obra de John Ford la puesta en escena suele componerse por el movimiento y la disposición física de sus personajes en un espacio determinado. Recordemos que en The Searchers, Lucy(Vera Miles) al enterarse que Marty(Jeffrey Hunter) se ha casado con una india le propina un golpe que lo derriba y lo hace caer sobre un sillón de madera que termina con las patas para arriba, igual que Marty. La comicidad en Ford aparece cuando lo primitivo derriba a lo cortés. Sobre ese mismo sillón va a caer Marty cuando dirima fuerzas con el otro pretendiente de Lucy. Las peleas en el mundo fordiano son parte de los rituales del pater familias. (6)

La desilusión no es ajena al recorrido del pater familias. En varias de sus obras, Ford nos muestra su descreimiento en el hombre asentado. Recordemos a Ethan regresando de la guerra y a su hermano, que es un hombre de familia que vive ajeno a las incomodidades del buscador. En la escena Ethan le entrega sesenta monedas de oro en una bolsa que le otorgaron como paga después de la guerra."!Sesenta monedas, y sin marcas!" dirá el hermano y las guardará satisfecho, en un hueco debajo de su banco de madera. La escena parece un comentario risueño sobre la vida cotidiana, sin embargo Ford quiere mostrarnos la diferencia y el contraste de visiones de cada hermano. El hermano de Ethan es un hombre asentado igual que otros personajes de las películas de Ford. El hermano de Ethan es el hombre asentado que literalmente se sienta sobre el dinero y fuma en pipa. Recordemos a muchos de los asentados del pueblo que esperan a los rescatados de los indios en Two Rode Together (1961) o a algunos de esos asentados que viajan en Stagecoach(1939) junto a Ringo(J Wayne) o sino recordemos al abogado idealista (James Stewart) de The Man Who Shoot Liberty Balance (1962). Todos ellos son la nueva América. Algunos honestos, otros no tanto. Algunos de esos asentados no dejan de ser héroes; Sin embargo, ante ellos, Ford no oculta su elección. Sabe, con resignación, que el pater familias asentado ha dejado de ser un buscador.


Esa desilusión sobre el hombre asentado en Ford, no deja de ser la misma que el director siente sobre el destino del indio no asentado. Esto puede verse en Cheyenne Autumn (1964) y en otras de sus obras. Son dos caras de una misma moneda que no hace más que reflejar la desaparición de una vida épica, para dar lugar a una vida de asentamiento.


El marco de la puerta de la casa de The Searchers es el marco familiar que delimita el mundo asentado del mundo de Ethan. Es un marco estrecho por el que se entra a la casa. Por ese marco hemos visto venir a Ethan derrotado con su uniforme sureño. A traves de ese marco Ford nos dice que es lo que queda afuera y que es lo que puede entrar.Hemos visto a su cuñada, que intuyendo los pasos cercanos de Ethan , sale a recibirlo como una enamorada secreta, que no puede ir mas allà del marco de la puerta. Sobre el final, otro marco nos permitirá ver a Lucy (Vera Miles) que sale a recibir a Marty para abrazarlo, más allá del marco de su casa. Es una marco de otra casa, pero que en el terreno simbolico funcionan como si fuera una sola .Podríamos intuir que Ford quiso contarnos la historia de The Searchers, a través de ese marco de la casa familiar. El sureño Ethan al quedar fuera de la casa ha quedado también fuera de la historia y ha entrado en el terreno mìtico.Si Wyatt tenia un horizonte amplio y venturoso al despedirse de Clementine; a Ethan lo vemos irse solitario hacia la inmensidad del desierto.

Por otro lado, el cine, desde ese marco, ve irse a un tipo de héroe y en definitiva a un tipo de cine. El camino estrecho del marco de Ethan nos permite verlo alejarse y perderse en el polvo del recuerdo. La cámara de cine queda dentro de la casa; mira irse a este héroe y se cierra la puerta desde adentro. No vemos quien la cierra.; pero entendemos que es el cine. Y a continuación imaginamos que la peregrinación incierta de Ethan ya estaba escrita cuando baleó los ojos del cadáver del indio, para que su alma vagara sin rumbo. Así vemos irse a Ethan, como un alma que se pierde en la eternidad del cine. (7)

-Por José Luis Nacci

1- Los arquetipos creados por Ford no se agotan en este estudio. No nos olvidemos que Ford realizó un centenar de películas

2- Este recurso que podría resultar invisible e inadvertido para el espectador moderno, es recurrente en toda la obra de Ford.

3- Al pater familias lo acompaña la idea de restituir lo paradisiaco, sin embargo en su recorrido esa nostalgia por un estado ideal comienza a desencantarse a medida que nos acercamos a sus obras finales.

4- En The Quiet Man (1952) la casa es encontrada en Irlanda, huyendo el héroe de un pasado doloroso. En The Grapes of Wrath(1940) la travesía se emprende para recuperar la casa y la tierra.

5- En Gardens of Stones (1987) de F.F.Coppola el joven protagonista que quiere ser soldado se presenta con la misma torpeza que este joven frente a Clayton.

6- En las persecuciones o en las disposiciones compositivas en espacios abiertos cuando hay alguna batalla, podemos encontrar puntos de contacto entre la estética de Ford y las obras pictóricas de Remingnton.

7- No olvidemos que En el The Godfather (1972) se cierra la puerta y Kate queda afuera del mundo de su marido, todo lo contrario ocurre con el grupo familiar en The Searchers. Entender que queda afuera y que queda adentro del marco de esas puertas en esas películas, es entender el universo de estos autores y la historia del cine legada de dos Pater familias.

lunes, 21 de abril de 2008

Autores: Samuel Fuller


Cuando Martin Scorsese admite que el primer recuerdo que viene a su mente en relación al cine es una imagen de un film de Samuel Fuller, podemos ejemplificar de manera muy concreta la agresión visual a la que se somete un espectador cuando asiste a una de las obras de este director. El mundo de Fuller es un extraño lugar en el que la transgresión y la incorrección parecen ser elementos que se encuentran de manera vital en su universo. Fuller incorpora esta maniera al entramado clásico.-1-

El primer ítem a destacar cuando se menciona a este maverick-2- del celuloide, es la audacia a la hora de tocar ciertos temas que hasta entonces estaban reservados para los directores de la clase b o para algún caso aislado de realizadores con pretensión de independencia. Fiel a su formación como escritor de policiales negros y periodista, Fuller es un director que se apoya en la solidez narrativa propia del medio periodístico y la transfiere al cine como si la cámara fuera una verdadera máquina de escribir. De hecho, si profundizamos en este punto, tomando como referencia la línea temática, podríamos aventurarnos a decir que la corriente periodística a la que adhiere sería el amarillismo. Mujeres violando hombres, periodistas que se hacen pasar por locos para retratar la vida en un manicomio, magnates pedófilos y prostitutas arrepentidas, conforman la galería de historias que aparecen en sus películas. Casi todos guiones escritos por él que no se guardan nada y cuyo apoyo es la total comprensión del verdadero poder hipnótico que tiene una cámara. En sus escenas abundan situaciones que caminan por el delgado límite que divide lo sugerido de lo explícito, un ejemplo puntual de esto lo encontramos en el comienzo de “The Naked Kiss”(El Beso Desnudo -1964) en la que aparece una diva con un zapato de tacón en la mano golpeando furiosamente hacia la cámara. Esto podría ser emblemático del cine de Fuller: golpear al espectador.

Sin embargo, lo sorprendente no está, como se podría pensar, en que la imágen nos muestra el punto de vista desde la subjetiva del que recibe los taconazos sino en que segundos después, éste le quita una peluca a la mujer revelando una cabeza afeitada al ras. Esto es lo verdaderamente novedoso en Fuller, el hecho de llevar más allá la imagen del héroe, de la misma manera que Orson Welles en “La Dama de Shangai”, al cortarle y teñirle el pelo a la mítica Rita Haytworth.

A partir de lo expuesto en el párrafo anterior podemos evidenciar una decidida vocación por la subversión de las convenciones genéricas planteadas a la hora de trabajar los modelos. Para citar algunos ejemplo entre muchos, nos encontramos con soldados que ponen preservativos en sus fusiles en la épica bélica de “The Big Red One” (1981), o con un duelo en el que el protagonista no tiene reparos en herir a la dama con tal de liquidar al villano en “Forty Guns” (1957).-3- Estos casos no hacen más que demostrar que en el mundo de Fuller siempre hay algo incómodo para con el espectador, algo que lo desacomoda.

Todo esto nos lleva a pensar que el equilibrio entre forma y contenido está perfectamente balanceado en favor de una narrativa fluida y contundente. Por eso nos queda afirmar que Samuel Fuller fue una de las últimas llamas que continuó con una extraña tradición de geniales, pero esotéricos narradores como Jaques Tourner o Edgar Ullmer.

-Por Darío Boch-

-1- Ser innovador sin dejar de ser clásico.

-2- Este témino se refiere a aquellos directores del período clásico que se manejaban con liberatd dentro de los estudios y al margen de los mismos. Literalmente significa águila, libertad, o libertad del águila.

-3- Recurso que va a ser utilizado por a posteriori por varios directores entre ellos Walter Hill.

sábado, 12 de abril de 2008

Palabras de Cine

"Todo hombre debería conocer el poder antes de caer" La frase de la película Rio Bravo (1959) de Howard Hawks es la punta del hilo que nos permite adentrarnos en la obra de este autor para analizar el universo moral de sus peliculas. Para el cinefilo que conoce la obra de Hawks no es novedad que esta afirmacion temeraria dificilmente provenga del heroe Hawksiano. Aquel que tenga presente el film sabrá que es una frase de Nathan Bourdette (John Rusell) a Dude (Dean Martin), en el momento que aquel ingresa al pueblo con sus hombres armados para ver a su hermano preso. Es bueno recordar que en la disposicion espacial que se construye en el film hay un Centro de Gravedad que es la carcel-1- y como extensiones de este Centro de gravedad están el Hotel y otros lugares del pueblo donde transcurren los hechos. Desde ese Centro se irradiará toda la acción de la pelicula, porque es allì, en la Prisión, donde se aloja el grupo Hawksiano. Hay que recordar que para el heroe de Hawks el grupo es la referencia, el apoyo y es tambien el lugar desde donde se le recuerda al heroe quien es. El grupo cumple una funcion vitalizadora, diferenciada en dos facetas; afuera la acción, adentro la palabra. El grupo Hawksiano es muy verborràgico,pero tambien muy físico.


No es casual que en el entramado verborràgico que caracteriza las obras de Hawks irrumpan las frases cinicas de aquellos que quieren ver decaer al heroe. La frase mencionada por Bourdette utilizando la palabra Poder es una tipica bravuconada pretensiosa de los adversarios del heroe Hawksiano. El elegante Bourdette recurre a la palabra poder porque conoce y ejercita ese poder. Bourdette es un poderoso: "Disfrutalo Dude" le dice con ironia al inestable Martin, despues de haber dejado sus armas en la entrada al pueblo. No es casual que se lo digan a Dude, pues el es el Borrachin. Pero fue Dude quien alguna vez manejo sus armas entre los mas rapidos; y mencionamos esto porque arribamos al Talon de aquiles de estos heroes. No es el Poder algo que tenga relevancia en el universo del heroe hawksiano. El personaje de Dude funciona como un barometro del equilibrio entre el deber y la irresponsabilidad. Esto se ve claramente cada vez que quiere armar un cigarro. Ese temblor de sus manos es un temor a no poder cumplir con su deber. El alcohol y la embriaguez hacen olvidar las penas del amor, pero impiden que se manifieste la sustancia responsable del heroe. Para eso esta el grupo que acompaña a Dude, para recordarle lo que duele recordar y sinó revisemos la frase de Chance(J. Wayne) "A Dude no se lo puede tratar bien...". Lo dicho revela que el dolor del recuerdo puede ser curativo para este heroe tan particular.

En una escena sublime, posterior a la recien mencionada, Chance insistirá con el recuerdo, desempolvando las armas de Dude. Mas allà de la resonancia mitica de este hecho, recuperarlas implicara la rememoracion de un concepto olvidado por Dude: el y sus armas alguna vez fueron Uno; eso le ayudará a reinstaurar el limite entre Deber olvidado y la irresponsabilidad sin rumbo.

Las armas entonces emblematizan el oficio y la profesionalidad de los heroes de Hawks; por otro lado, el significado de esas armas para Dude reflejan su parte perdida. Mientras un vaso de Bourbon se interponga entre las armas y Dude, el personaje estarà incompleto. El efecto del bourbon hara que el limite se borronee y los valores pierdan sentido. Hacemos hincapié en palabra limite porque Hawks utiliza la matáfora de lo geográfico de manera recurrente. Superar sus limitaciones en todo sentido, pero tambien el peligro de olvidarse de aquellas cosas que deben delimitarse; y eso esta claro porque Hawks no tiene zonas ambiguas en su manera de ver el mundo. Los titulos Rio rojo, Rio Bravo, El dorado y los nombres de algunos personajes como Mississipi o Colorado, hacen referencia a la narracion que fluye como un rìo, a la vitalidad de esos héroes jóvenes, pero tambien hace referencia a la demarcación de fronteras geograficas que son a su vez reflejo de la demarcacion de valores. Eso explica que el accionar del enemigo del grupo hawksiano intenta siempre y de diversas formas hacer desaparecer los limites demarcatorios del grupo hawksiano (2)

En una de las escenas antologicas del film se rubrica claramente el ideal perdido de estos heroes. Agrupados en un circulo simbólico dentro de la recepcion de la prision, todos cantan a la vida libre y a la individualidad, sin embargo esta añoranza no deja de ser una utopia pérdida del heroe de Hawks, porque bien se sabe que el heroe en cuestión, es lo que es porque su esencia se manifiesta siempre en relacion al Grupo. La letra de la cancion hace referencia a algo que se añora, algo que nunca existio, una vida sin responsabilidades, que solo puede cantar alguien que tiene un alto sentido del deber y que vive despreocupado en relacion a a la idea de Poder. La letra hace referencia a "mi rifle, mi pony y yo". (3)

El peligro que corre el heroe hawksiano es perder el sentido del deber y caer en un individualismo extremo, convirtiendose en una figura de viso autoritario que se aleja claramente de la figura del heroe. Para ello es necesario recordar al personaje de Dunson (John Wayne) en Río Rojo (4). Para Dunson ya no hay limite. La idea de deber ha caido en una obsesion enfermiza y se ha transformado en la necesidad de ejercer un poder restrictivo y omnipresente sobre el resto del grupo. Dunson se pasó del otro lado. O sinó recordar al personaje de Harry Morgan de Tener y no tener, que vive una orgullosa soledad, hasta que descubre que puede servir a un grupo. Por ello cuando se superan los roces del poder dentro del grupo hawksiano, y se esfuma la idea del individualismo que se autoabastece, reaparece el ideal del deber que se fortalece en los fogones del grupo. Y es ahi cuando el Centro de Gravedad hawksiano se reacomoda (5)

-Por José Luis Nacci

1-Centro de gravedad de los valores del Grupo Hawksiano, que-nos es casual- tiene como ultima linea de defensa al anciano Stumpy, representando los viejos valores

2- La trompeta que resuena melancolica en el pueblo, rememora la gesta de El alamo y nos da la la idea de ruptura de limite con la consecuente sensacion de invasion .

3-Es uno de los momentos mas bellos del cine, que reùne a los legendarios Dean Martin y Ricky Nelson cantando a duo con Walter Brennan acompañando.

4- Las mujeres hawksianas hacen que el héroe olvide momentáneamente su centro de gravedad, pero tarde o temprano el centro de gravedad absorve a esa figura femenina.

5- Recordar q Río Bravo es una respuesta a High Noon de Fred Zinemann, en la que el comisario supeditaba su accionar (su deber) a la ayuda del pueblo.

jueves, 24 de enero de 2008

Postales de Cine : "Shadow of a Doubt (1943)"





El cine es un lenguaje de miradas. Las miradas en el cine (y en la vida) dicen la verdad, aunque la verdad esté oculta por una mentira pasajera. Tal vez el rostro no esté de acuerdo, pero son los ojos los que nos transmiten la verdad de los sentimientos de los personajes. Inclusive cuando ocultan lo que no conviene que el espectador aún sepa. Un buen actor de cine sabe que hacer con sus ojos. Aunque no tenga una buena dicción, ni una actitud postural expresiva; si el actor de cine trabaja con su mirada, todo lo demás acompaña. Cualquier película de Hitchcock puede seguirse perfectamente a partir de un seguimiento de las miradas de sus personajes. Tomemos escenas aisladas de películas como “Shadow of a Dubt” [1][i]y nos daremos cuenta de lo que estamos hablando. Recordemos aquella en la que el tío Charly (Joseph Cotten) esta en la cama y su sobrina (Teresa Wright) y su hermana (Patricia Collinge) le han llevado el desayuno. Es una situación aparentemente simple, que el espectador podría ver como una simple transición o como una escena de respiro hacia otros momentos de mayor relevancia. Sin embargo, podemos afirmar que nada es transición en Hitchcock; los "respiros" en su cine son muy significativos. En su obra nada es irrelevante y esta escena es una muestra de la clara disposición estratégica del Universo Hitchcockiano. La disposición de los personajes nos genera una sensación ambigua, porque si bien Charly ya es un hombre, existe hacia a el un trato similar al de un niño mimado. El tío Charly es un hombre pero parece un niño; es un hombre que reúne condiciones duales y contradictorias, que reflejan su inmadurez y su fascinante atracción sobre los otros. En el plano los tres miran una foto de cuando el tío Charly era niño. Es un momento de felicidad familiar. Es el momento en el que percibimos lo que cada uno piensa. La hermana y la sobrina idealizan al tío, y nos damos cuenta de ello por la manera en que lo miran y por la disposición protectora que tienen ellas alrededor de la cama de Charly. Pero también nos damos cuenta lo que piensa el tío Charly porque su mirada revela algo oscuro, que las dos mujeres no alcanzan a captar. Es una mirada cómplice del tío Charly hacia nosotros. En un solo plano Hitchcock construye un conjunto de miradas que le permite participar al espectador como a un voyeur privilegiado. La información que tiene el espectador aventaja a la de las mujeres, pero éste no sabe todo lo que sabe el Tío Charly. A su vez la escena sirve para resignificar la vieja foto de familia. Al principio de la escena la foto representa la infancia de Charly pero sobre el final la misma ha adquirido una significación diferente. Nunca vemos la foto, pero a través de ella nos damos cuenta cómo ve el mundo cada personaje. Sumado a esto el tono que usan los personajes para expresarse, agrega otro elemento de significación que transcurre de manera paralela a la imagen[ii]. A partir de esa construcción, la mirada del tío Charly contiene un enigma a revelar, que nos acerca a él porque nos hace cómplices, pero a su vez nos aleja, porque su oscuridad es intimidante.


La escena tiene entonces tres tipos de miradas. La de la hermana, inocente y nostálgica; la de la sobrina idealizadora, y peligrosamente idílica y la del tío, que solo es percibida por el espectador; esta última nos permite compartir con él algo inquietante.... su interioridad siniestra[iii]. Mientras presenciamos este juego de miradas, la hermana del tío Charly cuenta con inocencia un suceso que su hermano vivió de niño cuando recibió un golpe en su cabeza. Ella lo cuenta con gracia, como un recuerdo alegre. Para ella, una travesura más de su hermano. Para su sobrina la anécdota es algo curioso; pero para Charly es un recuerdo que se refleja en su rostro, como un secreto al que nadie debe acceder. Esta información nos refleja lo que el personaje sabe de si mismo. La disonancia de tonos le permite a Hitchcock construir una “postal familiar” de apariencias que no necesita de otros planos porque su geometrìa de miradas es suficiente en si misma. Por eso a Hitchcock lo vamos descubriendo, en su obra como en la de otros grandes autores, las cosas están a la vista, pero no se ven.... nuestra tarea es aprender a mirarlas.

-Por José Luis Nacci


[i] Entre nosotros “La Sombra de una Duda” (1943)

2 De esto hablaba Hitchcock cuando hacia referencia al principio de desfasaje de la imagen y el sonido..

3 Recordemos que la cama es el lugar de meditación del tío Charly.

jueves, 17 de enero de 2008

Introducción


El Kimono Escarlata es el nombre de una película de Sam Fuller, que los cinéfilos más atentos recordarán con sumo placer. Para nosotros utilizar el nombre de su película no deja de ser un emblema de identificación con aquellas cosas del cine que son auténticas, sencillas y distinguidas a la vez. Los escritos a los que puede acceder el lector, estarán impregnados de cinefilia pero también revelarán un claro intento de teorizar sobre el cine. Si bien es cierto que este no será un lugar dedicado exclusivamente a Fuller , esperamos que el lector reciba un impacto directo, frontal, como el que recibe cualquier espectador que ve las películas del mencionado director. Los comentarios que hagamos sobre las diferentes películas serán la excusa para reinstaurar la mirada hacia el cine clásico y a partir de ahí la consideraciín hacia el cine moderno.